“Conquistas de una ciudad ocupada”

“Conquistas de una ciudad ocupada”

Por Mirasoles

DISPERSIÓN

mediaesquina

casi sin luz, arrebolada

me escupe esta mentira.

un vecino camina inerte e histérico

nosotros lo reconocemos pero no le decimos nada

el diariero

me indicó

alguna vez

el paso con el que

Respiro

Pero nunca se lo dije a nadie

mediaesquina

los sinvergüenzas de la mesita de al lado

discuten sin saber muy bien qué dónde cómo

gente gente gente

agente de comercio

gente gente gente

agente de policía

gente gente gente

agente publicitario

gente gente gente

gerente bancario

Conjunto de Mediaciones Nocturnas para enfrentar a la Soledad Inmanente

hombres

entre el graffiti y el sexo

entre la prostituta y el cliente

al volante

hombres sin cara

quizás nos piensan a todas en cuartos de esclavas

quizás nos piensan a todos

gente pueblo multitud personas muchedumbre individuos humanidad…

…“apaciguados”

MANSOS que embisten a prójimo

SALVAJES que esconden la cara de la vileza del ingenuo

Lleno renglones con esta ciudad

en sociedad

mi vanidad

hace caer estos versos parásitos

bicho de ciudad /coliflor / picaflor

PASOS Y COORDENADAS

hordas de hormigas vinculan mis pies al temblor del tsunami

ahora suben y el ardor cala profundo

desterrado viviré entre el olor a madreselva de las cortadas y

el humo negro de la avenida que nos invade hasta dentro del colectivo

donde viajo hacia el centro

me descubro errante

y

me confieso diligente

ante

los peatones que me miran:

soy aterradora

una garrapata de capital

como los que desconocen el amor

porque prefieren el bienestar

me seduzco

te suspiro

y me reclamás

a la distancia

que vuelva…

y yo me negaré siempre

desde el vaso desdentado y la vajilla informe

que busqué en los restos

de burger king

aullando a los viejos para asustarte.

imágenes por once

hombres manchados

mujeres encinta

estamos agobiados

por el frío y el calor

y esta humedad que no se decide a ser de otros

caminamos por Corrientes y hasta Castelli

(parece que consumimos más calorías)

y en nuestro devenir desenfadado

nos huele a garrapiñadas la esquina

mientras los gritos reproducen palabras ausentes

con tono comercial y suplicante

y así confirmo la incertidumbre urbana:

cómo me escapo del agobio.

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